Que finalmente el senado de la República sí aprobó la designación de la corrupta Adela Jiménez como magistrada del Tribunal Estatal Electoral, a pesar de que este martes se puso en evidencia que se trata de un perfil sumiso al morenista Javier Corral Jurado.
Con esto se ratifica el hecho de que el Congreso de la Unión está a los pies de Morena, y que sus altibajos son sólo simulaciones para hacer creer que la oposición es tomada en cuenta.
Ahora el Tribunal Estatal Electoral de Chihuahua, tendrá cargada a favor de Morena, sin que alguien pueda hacer algo al respecto, pues así lo decidió el senado que por cierto, preside Gerardo Fernández Noroña.
Es un punto en contra para el avance democrático de Chihuahua y para los órganos electorales, pero también son las consecuencias de malas gestiones y las traiciones que le han aplanado el camino a Morena.
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La gobernadora Maru Campos le puso un estatequieto a su chavito protegido Rafa Loera, y es que coincidió con la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, en el sentido de que todos los que aspiren a algo tienen que esperar los tiempos electorales.
Haciendo alusión a Andrea Chávez, pero llevándose entre los pies al secretario del Bien Común, Rafael Loera Talamantes quien, sin figurar en anda ya promocionándose, según dicen, para la alcaldía de Chihuahua.
Rafa tuvo también hace poco una reunión con representantes de algunos medios, a quienes les pidió el apoyo para posicionar su imagen, aunque el tiro le salió por la culata, pues sólo se convocó a los que consideró líderes de opinión, pero dejó fuera a los que realmente marcan la agenda.
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Cuando los dueños de las cafeterías de la UACh anunciaron que se iban a retirar por las restricciones que puso la SEP y la Ley Anti Chatarra, “El Primazo”, el rector Luis Rivera Campos, se lamió los bigotes, porque vio la oportunidad de monopolizar el asunto.
El problema es que los concesionarios se están retirando porque las nuevas medidas saludables, convierten el negocio en un vil pasivo, o sea, no hay ganancias pero sí muchas pérdidas, pues la comida “Fit” es mucho más cara.
Esto le cayó como agua fría, porque pensaba que a base de presiones y de acuerdos por debajo de la mesa, se podría apoderar de ese negociazo, pero para su mala suerte, ahora tener una cafetería va a ser una verdadera carga para el que se aviente el tiro, de no ser así, la UACh tendrá que solventar el problema.
